'las texturas del silencio'
Diana Iniesta y Iosu Moracho, pintura y poesía en la casa de cultura de Elizondo
'las texturas del silencio' podrá verse hasta el domingo en arizkunenea


El agua y su papel trascendental en el paisaje y la plasticidad de los versos protagonizan la exposición

Ana Oliveira Lizarribar - Jueves, 14 de Julio de 2011 Pamplona.
La casa de cultura Arizkunenea de Elizondo acoge hasta este domingo la exposición Las texturas del silencio (Ixiltasunaren ehundurak), en la que pintura de Diana Iniesta y la poesía de Iosu Moracho configuran un universo propio.

La muestra supone un nuevo paso de esta artista catalana que en 2008 dejó su trabajo en el diario La Vanguardia para trasladarse definitivamente a Baztan, "enamorada" del paisaje y sus gentes y encandilada por los cursos de artistas como Tomás Sobrino y José María Apezetxea. Desde entonces, Iniesta ha realizado varias exposiciones, pero ésta es muy especial, ya que resulta de un año de colaboración con el poeta y educador de Sarriguren Iosu Moracho, que recibe a los visitantes de Arizkunenea con un poema muy significativo: "Un pintor, una pintora... es un poeta -que se ha quedado sin palabras- que ha trascendido las palabras y ha hecho acopio de imágenes sensibles a los sentidos", dice uno de sus fragmentos.

En el ámbito pictórico, el motivo central de la exposición lo ocupan las series Isla y Nieblas, ambas vinculadas al elemento agua y a su papel trascendental en la naturaleza como símbolo de fertilidad y cambio y al efecto que ésta ejerce sobre el paisaje, bien se trate del mar y sus diferentes estados, bien del verde valle de Baztan, "velado a veces por la niebla, desdibujado otras por la lluvia", dice la pintora. Así, el espectador se encontrará con una obra "siempre lírica, serena, delicada y extraña a la vez, caracterizada por la horizontalidad del trazo, la perspectiva desdibujada o la transparencia del color", reflejando el sentimiento íntimo que ha movido a la autora: "la búsqueda del silencio, de ese momento de espera mágico ante el lienzo".

Por su parte, Moracho presenta una serie de poesías sensuales y plásticas que refuerzan la visión compartida por ambos creadores: "En el silencio nos vivimos íntimamente, nos desnudamos sin temor a otras miradas. En el silencio lamemos y curamos nuestras heridas (...) Además, el silencio tiene sus tramas y sus texturas...", escribe.


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